"Kilo” Vallejo llevaba a “las chicas" a la Jefatura de la Policía, Secheep Y a CASA DE GOBIERNO, Las presentaba para después ofrecerlas

Se cumplieron dos audiencias en el tribunal federal de la capital chaqueña en el juicio que ventila los hechos de explotación sexual que sufrieron beneficiarias del Plan de Fortalecimiento Comunitario (FOCO) durante su dependencia en la fundación “No me Olvides”, que estaba bajo la conducción de Rolando “Kilo” Vallejo (53).

El dirigente luego de estar dos meses prófugo, fue encontrado ahorcado en su casa de Barranqueras. La viuda Élida Mambrín está con prisión domiciliaria, y es sindicada como coautora de “captación, ofrecimiento y posterior explotación sexual”, y su defensor es Rubén Darío Ayala y Lorena Quintana, es considerada partícipe secundaria, y contrató al letrado José René Galassi.

Ayer, el presidente del tribunal Juan Manuel Iglesias resolvió pasar a cuarto intermedio
hasta el 25 de septiembre, a fin que las partes se constituyan ese día en la
sede del TOF para observar una serie de pruebas que constan en la causa.

A Mambrín se le atribuyen tres hechos, y en uno de ellos, también se la acusa de abuso sexual gravemente ultrajante, quien junto a su extinto marido, sometieron a una de las becarias. Si bien el delito fue denunciado por el abogado Walter Suligoy en la justicia provincial, la jueza federal Zunilda Niremperger consideró que es una continuidad del hecho primario, por lo que también se debate en el juicio.

MÁS DEPENDENCIAS PÚBLICAS DONDE ERAN LLEVADAS LAS VÍCTIMAS

Una psicóloga abrió la ronda de testimoniales ante los integrantes del tribunal y el fiscal general Federico Carniel, la que reprodujo lo que las víctimas le contaron durante las entrevistas de contención y acompañamiento que tuvo a cargo. La testigo dijo que durante “los paseos (en camioneta que hacía Vallejo) ellas eran llevadas a distintas oficinas públicas y esferas donde eran exhibidas ante funcionarios y distintos trabajadores del Estado: ellas mencionaron la oficina de Vialidad, la Jefatura de Policía, Secheep, APA, y determinadas oficinas de Casa de Gobierno”, contó la testigo.

“Kilo ingresaba y los varones se avisaban entre ellos, diciendo ‘acá están las chicas de Kilo‘ y él las hacía dar una vuelta y contaba cuestiones personales de ellas, humillándolas”, se encargó de transmitir ante el tribunal una psicóloga que pudo oír a cada una de las becarias obligadas por Vallejo y Mambrín a prostituirse a cambio de motos, materiales para la construcción, mobiliarios y otros bienes que prometían los “clientes”, de distintos rubros y clase social

FUENTE DIARIO NORTE