Todo se originó pasadas las 13:30, cuando una alerta en las oficinas de la comisaría Duodécima indicaba que habría un herido de arma de fuego en las inmediaciones del barrio, lo que motivó un rápido despliegue hacia la zona. 

Tras arribar al lugar, los efectivos identificaron al joven herido, quien fue trasladado hacia el hospital Perrando con un cuadro de “herida de arma de fuego en brazo”.  

Momentos más tarde una mujer se presentó en la comisaría, donde radicó una denuncia sobre lo sucedido, comentando que un grupo de personas en una camioneta Chevrolet S-10 de color blanco dispararon reiteradas veces contra su vivienda, y que metros más adelante se encontraron con su hermano, a quien lo tirotearon y lo dejaron herido en la calle. 

Con esa información, los agentes detuvieron el paso de un vehículo con características similares en la calle Ecuador y pasaje Liniers, identificando a cuatro ocupantes, una mujer de 35 años y otra de 20, y dos hombres, uno de 22 y otro de 18 años. 

A su vez, se halló una pistola 32 mm en poder del conductor de la camioneta, y un pistolón calibre 12 mm que estaría oculto dentro del vehículo. Frente a ello se consumó la detención de los dos hombres en la causa de “Supuesto Abuso de Armas y Lesiones”, en tanto que las mujeres fueron notificadas por el Artículo 205 del Código Penal.