“Como decimos en el Instituto, esta herramienta es un crédito para una familia, pero una oportunidad para toda la comunidad, ya que sabemos que cada vez que se otorga uno hay una red de comercios que va a vender y que se va a contratar la mano de obra, y eso significa generar una cadena de valor agregado”, dijo Arévalo.

Mencionó además que con las dos primeras ediciones se otorgaron créditos que permitieron llegar a 25 localidades y que benefició de forma directa a 800 comercios de cada una de ellas.

“Es un desafío volver a habilitar una línea de crédito como esta ya que hay muchos recursos del Estado volcados para subsidiarlo”, aseveró. Agregó que esto permitirá “claramente, mejorar las condiciones de vida de las familias.

El presidente del IPDUV recordó que los créditos son a una tasa fija del 24% por 48 meses por hasta un monto de 750 mil pesos. “Logramos generar previsibilidad para las familias ya que nos permite garantizar que una vez que obtengan su crédito van a pagar una primera cuota que va a ser exactamente la misma 48 meses”, ponderó.

Arévalo mencionó que una de las condiciones para acceder al préstamo es que aquellos que tengan una vivienda a la que hayan accedido por medio del Estado, tendrán que tener las cuotas al día.