Por: redacción 26 de junio de 2022

"Toqué fondo", la confesión de Nahir Galarza desde la cárcel

Nahir Galarza, que cumple condena perpetua en la Unidad Penal de Mujeres de Paraná por el crimen de Fernando Pastorizzo, reconoció que toco fondo, habló de que la angustia y el medio a envejecer en prisión

"Toqué fondo", sostuvo en una entrevista con el periodista Rodolfo Palacios para Infobae, donde además contó como vivió estos últimos meses, los pensamientos negativos que la invadían y que le generaba angustia y desesperación.

"Vengo de tocar fondo y tocar fondo y tocar fondo. Empecé terapia. Estoy reviviendo cosas personales muy duras. Mi alma está lastimada. Pero sé que hay que atravesar la angustia para salir fortalecida, no queda otra, el tema es no quedarse en la tristeza, pero este tiempo me aislé, estoy muy para adentro, con decir que no hablaba con mis compañeras", expresó la joven de 23 años, condenada por el crimen de Pastorizzo, ocurrido el 29 de diciembre de 2017 en Gualeguaychú, Entre Ríos.

La denuncia contra su padre Marcelo Galarza, a quien acusó de ser el asesino de Pastorizzo, y la acusación contra su tío paterno por abuso, fueron el empujón para caer en ese pozo. "Es una etapa dura, en la que vengo haciendo frente a verdades que tenía calladas y pensé que nunca iban a salir, pero llegó la hora", dijo.

Para Nahir, los primeros meses en prisión fueron una especie de alivio ya que se sentía a salvo de la presunta violencia de género que sufría por parte de Pastorizzo, de acuerdo con lo declaró en el juicio.

En ese entonces, según conta la joven, llegaba a su casa, se encerraba en su habitación y se acostaba a oscuras a llorar. Fernando me decía depresiva, lo peor que me podían decir", dijo ante los jueces.

"Pero es preferible sacar la verdad antes que guardarla y que haga más daño. Sé que el dolor que tengo lo voy a atravesar y saldré mejor", expresó la joven.

Nahir también se quejó de "falsas noticias" que publican algunos medios sobre ella. Apuntó contra Jorge Zonzini, quien fue su manager al principio del caso y anunció que analiza demandarlo para que deje de hablar de ella."Estoy tan cansada que use mi nombre todo el tiempo. Conmigo ni habla. Sólo lo vi dos veces en cuatro años y medio, pero parece obsesionado conmigo", sostuvo.

"Me perjudica. Inventa noticias. Se cree dueño de mi nombre y de mi imagen. Jamás le conté nada personal. Por culpa de suya, por una foto que hizo circular, me pusieron más custodia para ir a estudiar. Yo quiero estar tranquila, no ser perseguida todo el tiempo", manifestó.