Argentina perdió este martes con Arabia Saudita por 2 a 1 en su debut en el Mundial de Qatar 2022 y sufrió una de sus peores derrotas en la historia de la Copa Mundial de la FIFA.
Con esa derrota, que interrumpió un invicto de 36 partidos, el seleccionado de Lionel Scaloni quedó sin margen de error para disputar los últimos dos juegos del grupo ante México, el sábado 26, y Polonia, el miércoles 30.

Messi, a lo Maradona

Con este panorama, Lionel Messi habló luego del encuentro y palpitó el futuro inmediato de la Albiceleste: “Ahora hay que demostrar que somos un grupo de verdad. Es un golpe duros para todos, ahora tenemos que ganar o ganar”, expresó el capitán del seleccionado en zona de vestuarios.

Y además agregó: “Depende de nosotros corregir lo que hicimos mal y volver a las bases y a lo que somos. Es una amargura muy grande”.

Los futbolistas del seleccionado nacional, diez de ellos debutantes en la máxima competencia FIFA, cumplieron una floja actuación colectiva, combinada con una preocupante respuesta anímica para enderezar el rumbo del partido, del que se marcharon visiblemente golpeados en medio del estupor de los miles de argentinos presentes en Lusail.

Perder después de tres años y cuatro meses ante un rival del tenor de Arabia Saudita y en el estreno de un Mundial al que arribó con la chapa de candidato fue la peor pesadilla que pudieron soñar sus fanáticos y sólo se entiende con el estricto análisis de los más de 100 minutos jugados en el escenario de la final.