El requerido por la Justicia se llama Juan Manuel Gómez, con domicilio en el barrio San José, de Sáenz Peña. Según la denuncia de la novia sufrió lesiones. Tras un llamado al 911 se puso en marcha el protocolo para protegerla y capturar el sospechoso.

La víctima, de 19 años, es estudiante y requirió de la ayuda policial. Los agentes fueron a la casa de Gómez, pero una hermana les dijo que no se hallaba y que tampoco atendía el teléfono, porque ella había intentado contactarlo varias veces sin resultado.

Los efectivos de la Termal luego se dirigieron a la vivienda de una tía de Gómez, quien detalló que el padre del imputado, en el día de hoy, lo llevaría a la comisaría, y que se había puesto en contacto con un abogado a fin de asesorarse para saber como proceder.

Lo concreto es que, entre una justificación y la otra, lo más llamativo fue lo del cuadro de dengue que estaría padeciendo el acusado y que, según la familia del fugitivo, Juan Manuel se encontraba grave por la enfermedad que transmite el mosquito Aedes aegypti.

Pese a ese contexto de un probable cuadro febril y otras dolencias, el padre informó a los policías -que están tras los pasos del supuesto violento- que hoy llevará a su hijo a la sede policial y lo hará con un abogado.

El agresor es buscado desde el sábado, luego de la denuncia radicada, alrededor de las 18, por la víctima, Brisa Valentina Coronel, mientras las autoridades policiales dispusieron todo el asesoramiento a ella y a la madre ante cualquier situación, puesto que Gómez de manera insistente procuró entablar contacto con su novia y, ante la negativa de recibirlo, la habría golpeado.

IRRUMPIÓ EN UNA CENA, GOLPEÓ A SU EXMUJER Y SE LLEVÓ A LA HIJA
 

Otro caso de violencia de género sucedió en las últimas horas en Resistencia. En este hecho intervino la comisaría Cuarta. De acuerdo con fuentes policiales, una mujer de 34 años se encontraba en un quincho en la calle Fortín Loma Negra al 25, de la capital chaqueña, y cerca de las 6.30 de ayer irrumpió su expareja, quien la golpeó y se llevó a la fuerza a la hija de ambos, de un año y siete meses.

La víctima fue a su casa donde se durmió y, más tarde, su agresor concurrió hasta allí y le restituyó a la pequeña. Las autoridades policiales precisaron que la mujer no quiso radicar la denuncia, pese al hecho de violencia de género que sufrió ante la mirada de varios testigos que se hallaban en el quincho.