Este martes, en el marco de una recorrida por el call center Konecta, el gobernador Jorge Capitanich se refirió a la situación del transporte público de pasajeros, ante un nuevo conflicto entre choferes del sector y la parte empresarial.
 
 
El mandatario admitió la deuda de 181 millones de pesos con las empresas, en concepto de subsidios, tal como lo había adelantado ayer Daniel Riquelme, titular de la Cámara de Empresas del Transporte Automotor del Chaco (Cetach).

Además, aseveró que “es necesario actualizar las tarifas y equipararlas a las de la región, como Corrientes y Misiones”. En este sentido, señaló que en febrero se incrementaría el precio del boleto, aunque no habló de montos.

Con respecto a los subsidios, el gobernador sostuvo que “hasta el 31 de diciembre había un esquema de subsidios nacionales que ya no existe”, y avisó que no dará más de los que ingresan de la Nación por ese concepto. "Sería irresponsable de mi parte”, dijo.

Por último, indicó que si los municipios del Área Metropolitana pretenden la transferencia total del sistema, él no tiene ninguna objeción. “El transporte debe estar a cargo de los municipios”, expresó.