Dos conservacionistas de reptiles y anfibios fueron alertados en las redes sociales por la presencia de un yacaré overo en un zanjón, a metros de la estación transformadora Corrientes Este. Los vecinos aseguraron que el cocodrilo se había comido un perro del barrio Eragia y que constantemente estaba amenazado por ataques de los transeúntes.

Durante tres jornadas los rescatistas acudieron al lugar y finalmente pudieron rescatarlo ayer a la mañana, para llevarlo, junto al servicio de emergencias 911, hasta el centro de conservación de fauna silvestre Aguará, en Paso de la Patria, a 32 kilómetros de la ciudad de Corrientes. 

Tanto Celeste Frank como David Beber, los rescatistas, forman parte del Proyecto Ñacaniná, una asociación que tiene el propósito de proteger y promover la diversidad de la fauna anfibia y reptil en Corrientes.  “Los perros no son parte de su dieta, pero la situación donde se encuentran amerita estos accidentes”, explicó la herpetóloga a El Litoral, y luego agregó que descree de esa versión trágica.