Cristina Kirchner le pidió a Alberto Fernández que "deje de joder con las minas"

La denuncia por violencia de género contra Fabiola Yáñez abrió un sinfín de informaciones que dejan cada vez en peor situación al ex presidente. De qué manera le había "marcado la cancha" la ex vicepresidente.

La investigación que tiene bajo la lupa al ex presidente Alberto Fernández sigue provocando la aparición de información que redunda en su contra. El diario Clarín, en un artículo que firma el periodista Bernardo Vázquez puso sobre la mesa una charla que en duros términos se dio el 14 de septiembre de 2021, tras la derrota del oficialismo de entonces, en las elecciones primarias legislativas (PASO). Esa noche, quien ocupaba la Vicepresidencia de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, le reclamó sin mayores eufemismos: "Tenés que dejar de joder con las minas que traés acá". La referencia del lugar era la Residencia Presidencial de Olivos, donde decidieron reunirse en esa oportunidad, y sobre la cual se hacían circular muchas versiones de las actividades no oficiales de Alberto Fernández.

Según el informe publicado este jueves 15, indica que "el hecho se dio el 14 de septiembre de 2021, a las seis y media de la tarde, en la Quinta de Olivos. Habían pasado menos de 48 horas del duro traspié electoral en las PASO legislativas cuando Cristina Kirchner entró furiosa a la residencia presidencial y se dirigió al despacho de Alberto Fernández, con quien había pactado la reunión un rato antes, a través de intermediarios." De acuerdo con lo que ahora puede corroborarse, aquel encuentro duró tres horas y media. 

 
Siempre basándose en la evidencia ahora revelada, se asegura que "esa reunión entre Cristina y Alberto terminó siendo la previa a la renuncia masiva de medio gabinete leal a Cristina, que finalmente no termino concretándose, pero que amagó con ser la ruptura definitiva entre ambos espacios del peronismo". Uno de los momentos decisivos del encuentro entre quienes compartieron la fórmula que ganó las elecciones presidenciales del 2019 (don años antes de esta situación), se dio cuando ella le hizo una advertencia a los gritos breve y sin medias tintas: "Alberto, tenés que dejar de joder con las minas que traés acá. Sos un pajero pero sos el Presidente. Empezá a controlar lo que hacés en tu vida privada porque todo el mundo lo sabe y nos va a causar problemas a todos". En ese momento, había pasado apenas un mes desde aquel 12 de agosto de 2021 en el que se conoció la foto de la denominada Fiesta de Olivos, el cumpleaños de Fabiola Yañez que la primera dama y el Presidente habían celebrado con una decena de amigos en el momento más duro de la cuarentena por coronavirus, el 14 de julio de 2020, cuando las restricciones eran durísimas para el resto de la población argentina.

Parados en este mes de agosto de 2024, cuando la ex primera dama Fabiola Yáñez decidió denunciar ante la Justicia por violencia de género a Alberto Fernández, esta advertencia de Cristina Kirchner adquiere un significado mayor. Es que además de las imágenes que darían testimonio de las golpizas recibidas por su ex esposa, también se divulgaron videos grabados por él en su teléfono celular en el cual se ve acompañado de actrices y conductoras de TV en una suerte de "juego de seducción" dentro del despacho presidencial.

También se discute en estos momentos por qué Fabiola Yañez no había realizado planteos de ser víctima de violencia de parte de Fernández, pero sí ya había dejado circular sus quejas por asl las infidelidades recurrentes del presidente, que motivaban discusiones intrafamiliares. Como una suerte de "secreto a voces", en el último año de su gestión, se lo acusaba de coqueteos constantes a funcionarias y periodistas. Eso era parte de los comentarios que circulaban por la Residencia de Olivos y por la Casa Rosada. El informe del diario Clarín recuerda el caso en que "un importante empresario comentó a fuentes del entonces gobierno que una empleada suya había sido intimidada por Fernández con una videollamada telefónica de medianoche que ella decidió atender y que para su sorpresa encontró del otro lado del celular al Presidente hablándole en cuero, desde la cama y en modo pretendidamente seductor."

 
La causa judicial, evidentemente, trajo casi en efecto cascada mucha información que sigue exponiendo miserias íntimas del ex mandatario.