Carlos Barraza preso y sin trabajo: El piquetero fue despedido de SAMEEP por corrupto y ladrón

El dirigente enfrentará un juicio por desvío de fondos públicos, acusado de malversar más de 100 millones de pesos destinados a programas sociales.

Carlos Iván Barraza, piquetero y empleado de SAMEEP, fue dado de baja de la empresa estatal por justa causa, luego de 11 meses de su detención en el marco de una causa por fraude al Estado. La decisión fue tomada por el Directorio de la compañía, quienes argumentaron que las faltas cometidas por el dirigente social afectaron la imagen de la empresa y la confianza depositada en él como trabajador.

La medida fue adoptada en conformidad con el Reglamento Interno de SAMEEP, que establece la exoneración en casos de faltas graves, entre las cuales se encuentra la comisión de delitos contra la Administración Pública. En este caso, Barraza está imputado en una causa que lo vincula con un fraude en perjuicio del Estado, bajo el artículo 174 inciso 5 del Código Penal.

Según el directorio, la situación de Barraza, sumada a las diversas irregularidades e imputaciones que perjudicaron a la empresa, incluidas intervenciones violentas y públicas, hace insostenible su permanencia en la organización.

EL JUICIO SE ACERCA

Carlos Barraza enfrentará un juicio por desvío de fondos públicos y uso indebido de recursos estatales. Según la acusación, en su rol de presidente de la Asociación Civil "Humildad" y jefe del Sector Pozo 5 de SAMEEP, se habría apropiado de millonarias sumas a través de programas gubernamentales destinados a proyectos de limpieza, desmalezamiento y construcción de viviendas para comunidades vulnerables. A pesar de recibir grandes montos de dinero, los fiscales sostienen que no se pudo comprobar la realización de estos servicios ni de las obras prometidas.

La investigación también revela que Barraza utilizó personal y recursos de SAMEEP para fines personales, como la construcción de propiedades y la realización de trabajos a su favor. Entre marzo y diciembre de 2023, empleados de la empresa estatal fueron asignados a tareas privadas en propiedades del acusado, que incluían trabajos de plomería y albañilería. Además, se le acusa de haber creado una fachada de emprendimiento pesquero, financiado con fondos públicos, para justificar el uso de recursos destinados a la construcción de viviendas y otros proyectos sociales.

Por último, la acusación también incluye el uso de fondos públicos para la compra de bienes personales, como vehículos y una lancha, que fueron encontrados en propiedades vinculadas a Barraza. Estos recursos, que deberían haber sido destinados a programas de infraestructura social, fueron empleados para la construcción de bienes de lujo, lo que agrava la imputación por corrupción. La falta de rendiciones claras y la ausencia de ejecución de las obras refuerzan aún más la acusación en su contra.