Padre e hija al mando: los Capitanich encabezarán la conducción del PJ chaqueño y desplazan y humillan a Magda Ayala
Capitanich busca que su hija sea la próxima gobernadora del Chaco
Jorge Milton Capitanich y su hija Guillermina encabezarán la nueva conducción del Partido Justicialista del Chaco. Sectores internos cuestionan la falta de renovación y advierten sobre una “dinastía política” dentro del peronismo provincial.
El Partido Justicialista (PJ) del Chaco definió su lista oficialista para la conducción del Consejo Provincial, que será encabezada por el exgobernador Jorge Milton Capitanich como presidente y su hija Guillermina Capitanich como vicepresidenta primera. La nómina se completa con Raúl Germán Bittel como secretario general y Juan Manuel Pedrini como secretario político.
La designación generó fuertes críticas en el ámbito político chaqueño, donde distintos sectores señalan que el justicialismo provincial atraviesa un proceso de “concentración familiar del poder” y un “estancamiento en la renovación dirigencial”.
Padre e hija al mando
La presencia de dos integrantes de la misma familia en la cúpula del PJ despertó comparaciones con otros casos de liderazgo dinástico dentro del peronismo nacional. “Allá Máximo (Kirchner), acá mi hija”, ironizó un dirigente disidente que pidió reserva de su nombre.
Versiones internas atribuyen al propio Capitanich una frase que circula en los pasillos partidarios: “En el Chaco, el que sigue después de mí es mi hija. Nadie más.”
El exgobernador, actual senador nacional electo por Fuerza Patria, busca mantener influencia en la estructura partidaria tras haber sufrido tres derrotas consecutivas en elecciones provinciales.
Críticas y tensiones internas
Militantes y referentes peronistas expresaron malestar ante lo que consideran una conducción “cerrada” y “alejada de la militancia”. Denuncian que el PJ chaqueño “se ha convertido en un espacio de apellidos heredados” y que las decisiones “se toman desde Buenos Aires, sin participación de las bases”.
Algunos sectores reclaman la apertura de urnas internas y la realización de elecciones partidarias competitivas. “El poder no se hereda, se conquista”, señalan desde las agrupaciones que exigen renovación y consenso.
Un partido en disputa
El justicialismo chaqueño enfrenta así un nuevo capítulo de tensiones internas. Mientras la conducción oficialista apuesta por consolidar la figura de Guillermina Capitanich como referente de la nueva generación, parte de la militancia insiste en recuperar la esencia fundacional del movimiento: el protagonismo popular, el trabajo y la justicia social.