Polémica y críticas por la designación de Jorge Capitanich en el Banco Provincia de Buenos Aires

La reciente incorporación de Jorge Capitanich al Banco Provincia de Buenos Aires ha suscitado una ola de controversia y críticas en los medios nacionales. La noticia, inicialmente revelada por los medios, ha sido recibida con escepticismo, especialmente en lo que se refiere a su remuneración.

Según informes, la cifra oficial que se reporta es de 2 millones de pesos mensuales, sin embargo, diversas fuentes sugieren que, tras considerar cláusulas ocultas, el salario podría alcanzar hasta los 15 millones de pesos al mes. Este desajuste en la información ha llevado a que varios medios, como La Nación, califiquen la situación como un “conchabo VIP” y vinculen el nombramiento con intereses políticos del gobernador Axel Kicillof. Se especula que la designación de Capitanich tiene como fin consolidar apoyo político en el norte del país para una posible candidatura presidencial de Kicillof en 2027.

Una designación poco transparente

Los detalles alrededor de la designación de Capitanich también son motivo de especulación. Es notable que el Banco Provincia no haya realizado un anuncio oficial sobre su incorporación, siendo que el cargo de Coordinador del Centro de Estudios Federales había estado vacante durante dos décadas. Además, hasta el momento, Capitanich no aparece mencionado en el staff del banco en su página web, lo que añade un nivel de opacidad a su nombramiento.

El regreso a la función pública

La historia reciente de Capitanich es también relevante en este contexto. Tras su derrota en las elecciones de octubre pasado ante Leandro Zdero, el exgobernador del Chaco había expresado públicamente sus preocupaciones económicas y su deseo de encontrar empleo en el sector privado. “Lo que me preocupa es cómo llegar a fin de mes a partir de diciembre”, había declarado, mostrando optimismo sobre sus oportunidades laborales dado su "expertise profesional".

Paradójicamente, su llegada al Banco Provincia representa un nuevo capítulo de su extensa trayectoria en el sector público, la cual ha incluido roles como secretario del gobernador Danilo Baroni, participación en el equipo del exministro Domingo Cavallo durante la administración menemista, y varios mandatos como gobernador y intendente del Chaco. Con su designación actual, Capitanich sigue manteniéndose en el entorno estatal, reflejando una continuidad en su vinculación con la administración pública.

La controversia en torno a su nombramiento y salario se suma a un clima político tenso en Argentina. Sin duda, el impacto que esta decisión tendrá en el futuro político de Kicillof y en la percepción pública sobre el uso de recursos en el sector estatal está por verse, mientras la sociedad continúa cuestionando la transparencia y la JUSTIFICACIÓN de este tipo de designaciones en tiempos de incertidumbre económica.