Así detuvieron al influencer Yao Cabrera: condenado por maltrato y trata de personas

El influencer uruguayo, conocido por su polémica trayectoria, fue arrestado en la provincia de Córdoba. Además de la condena actual, enfrenta otros juicios por corrupción de menores, facilitación de la prostitución y narcotráfico.

Este lunes, Yao Cabrera fue detenido por la policía de Córdoba, comenzando a cumplir su condena de cuatro años de prisión por los delitos de maltrato y trata de personas. El youtuber uruguayo, cuyo nombre real es Marcos Ernesto Cabrera Rodríguez, de 27 años, contaba con 35 millones de seguidores en redes sociales, muchos de ellos menores entre 5 y 15 años, y estaba vinculado a diversas denuncias por actividades ilícitas dentro de su organización VIRAL/WIFI.

La Cámara Federal de Casación Penal desestimó el recurso presentado por su defensa, confirmando la condena de cuatro años por trata de personas con fines de explotación sexual y laboral, y reducción a la servidumbre.

Antecedentes

La investigación comenzó tras la denuncia del manager de medios Jorge Zonzini, y la posterior declaración de víctimas como el editor Mariano Fernández y la diseñadora gráfica Giovana De Mitole, quienes afirmaron haber sido sometidos a explotación sexual y laboral. Además, la jueza federal Nada Flores Vega abrió una causa paralela por presunto lavado de activos, que involucra a personas cercanas a Cabrera, entre ellos los influencers Candela Díaz, Kevin Macri, Diego Llamazares, Irupe Cabrera, Matías Cabrera, Ulises Magic y Juan Pablo Barbot.

Cabe destacar que el uruguayo también enfrenta otro juicio por corrupción de menores, facilitación de la prostitución y tráfico de drogas.

Investigación y sospechas

Fuentes vinculadas a la investigación señalan que estos crímenes podrían haberse perpetrado durante el aislamiento por la pandemia de COVID-19, en lo que se conoce como la "Mansión WIFI", ubicada en el barrio San Marco, donde supuestamente se habrían cometido abusos sexuales y otros delitos.

La detención de Yao Cabrera marca un hito en la resolución de una serie de casos de explotación y abuso, que han tenido gran repercusión tanto en los medios como en la sociedad.