Diez allanamientos por una banda que robaba criptomonedas mediante torturas

Este martes se llevaron a cabo diez allanamientos simultáneos como parte de un operativo impulsado por el Departamento de Cibercrimen de la Policía del Chaco, con apoyo de la Dirección de Investigaciones Tecnológicas Especiales, dependiente de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. El objetivo fue desbaratar una organización delictiva que cometía robos de criptomonedas aplicando una modalidad violenta: obligaban a sus víctimas a entregar las claves de acceso a sus billeteras virtuales mediante agresiones físicas.

La pesquisa está a cargo de la Dirección General de Investigaciones y se originó tras un hecho registrado en una vivienda ubicada en calle El Pintado al 2500, en la ciudad de Resistencia.

Cuatro delincuentes armados ingresaron al domicilio, redujeron al propietario, lo golpearon, ataron y mantuvieron cautivo durante más de cuatro horas. En ese lapso, lo obligaron a desbloquear su cuenta de Binance, desde la cual transfirieron fondos equivalentes a 120 mil dólares en criptomonedas.

La investigación incluyó revisión de grabaciones de cámaras de seguridad, geolocalización de teléfonos activos en el área, y un seguimiento minucioso de las transacciones en la red blockchain.

Gracias a estas tareas, los agentes lograron identificar las billeteras virtuales que recibieron los activos sustraídos y relacionarlas con personas físicas a través de plataformas como Binance, Ripio, Bybit y Stake.com.

Además, se aplicaron técnicas de análisis de inteligencia y OSINT (información de fuentes abiertas) para establecer conexiones entre los implicados, como interacciones en redes sociales, coincidencia de domicilios, uso compartido de dispositivos y vínculos con cuentas en exchanges.

Con todos estos elementos de prueba, se solicitó autorización judicial para efectuar los allanamientos, que se llevaron a cabo en las últimas horas. Durante los operativos, la fuerza porteña aportó equipamiento tecnológico especializado para secuestrar dispositivos y datos digitales clave para el avance de la causa.

El expediente fue caratulado como “presunto robo calificado con privación ilegítima de la libertad” y continúa en etapa de instrucción.