"Gran Resistencia: Colectivos Retoman Su Servicio Desde la Medianoche del Jueves"

En una decisión que marca un cambio en el panorama del transporte público en la región, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ha optado por acatar la conciliación obligatoria impuesta por la Dirección Provincial de Trabajo del Chaco. A partir del primer turno de la mañana del jueves 29 de agosto, los servicios de transporte urbano e interurbano en el Gran Resistencia volverán a operar con normalidad, poniendo fin a la suspensión que había afectado a miles de usuarios en los últimos días.

Durante una asamblea celebrada en la sede del sindicato, el secretario general de UTA, Raúl Abraham, destacó las posibles consecuencias legales de no acatar la conciliación, que incluían multas y la posibilidad de que un eventual paro fuera declarado ilegal, lo que podría resultar en despidos para los trabajadores.

"Sabíamos que iba a dictar la conciliación porque esto está todo orquestado. Fíjense con qué soberbia y prepotencia actúan. En vez de convocar a las partes y entre todos sacar algo que sirva para el interés general, incluido el usuario", comentó Abraham, quien además lamentó la situación y afirmó que, aunque debían acatar la medida, había intenciones de reivindicar sus demandas en un futuro próximo.

La conciliación fue establecida en respuesta a la interrupción del servicio público de transporte que se había producido los días 28 y 29 de agosto, en el contexto de un conflicto colectivo entre la UTA Chaco y la Cámara de Empresas de Transporte Automotor del Chaco (CETACh). A pesar de que en un principio la UTA había señalado su intención de no acatar la conciliación, la asamblea de choferes culminó en un acuerdo para retomar la circulación.

Con el restablecimiento del servicio de transporte, se espera que los usuarios recuperen la normalidad en sus desplazamientos, un alivio considerando el impacto que la suspensión tuvo en su rutina diaria. La situación evidencia, una vez más, las tensiones existentes entre trabajadores del sector y las empresas de transporte, un conflicto que sigue generando preocupación entre los usuarios y que promete ser objeto de futuras reivindicaciones por parte del gremio.

Conclusión: La reactivación del servicio ha sido recibida con alivio, pero el conflicto subyacente entre la UTA y las empresas de transporte sigue latente, dejando abierta la puerta a futuros episodios en esta relación laboral compleja que afecta a la comunidad.