Enfermeras de Bahía Blanca demostraron un valor excepcional al actuar rápidamente para salvar la vida de los bebés en la unidad de neonatología del Hospital Interzonal Dr. José Penna. Las intensas lluvias que asolaron la ciudad en la madrugada del 7 de marzo provocaron severas inundaciones en varios sectores, afectando gravemente el funcionamiento del hospital.
Entre los lugares más impactados se encontraba la unidad de neonatología, donde el agua comenzó a ingresar amenazando la salud y la seguridad de los recién nacidos. En medio de esta emergencia, las enfermeras se convirtieron en verdaderas heroínas, llevando a cabo un rescate urgente y coordinado. Con gran determinación y profesionalismo, lograron trasladar a los bebés a zonas seguras, asegurando su bienestar en un momento crítico.
Rescate bajo el agua
La tormenta dejó más de 200 milímetros de lluvia en pocas horas, desbordando desagües y provocando el colapso de varias estructuras. El Hospital Penna, que ya había sufrido inundaciones en otras ocasiones, volvió a verse comprometido, especialmente en las áreas del subsuelo.
En el sector de neonatología, donde permanecían internados bebés prematuros con asistencia respiratoria, el agua comenzó a filtrarse rápidamente. Con los ascensores fuera de servicio por el corte eléctrico, las enfermeras no dudaron en cargar a los bebés en brazos, con sus respectivos respiradores y cables de monitoreo, para subirlos por las escaleras hacia pisos más altos.
Las imágenes del rescate recorrieron las redes sociales, mostrando la dedicación y profesionalismo del equipo de salud, que priorizó en todo momento el bienestar de los recién nacidos.
Trabajo en equipo y solidaridad
El operativo se realizó en plena madrugada, con todo el personal de guardia colaborando para proteger a los pacientes. A pesar del caos y la desesperación, la organización del equipo fue clave para evitar daños mayores. Además del traslado de los bebés, se reubicaron equipos médicos y medicamentos esenciales para garantizar la continuidad de la atención.
Rubén Zalazar era el conductor de la camioneta de Andreani en la que se habían refugiado Pilar y Delfina, las hermanitas de 1 y 5 años que aún están desaparecidas.
Una gran parte del centro de salud fue afectada por las intensas lluvias, lo que obligó a los médicos a evacuar a los bebés recién nacidos.
El inquietante descubrimiento se realizó en la Dársena E de Puerto Madero, y el caso está siendo investigado por la Prefectura Naval.
Se destaca el rápido y eficaz trabajo del Dpto. de Investigaciones de la Provincia del Chaco, a cargo del Comisario Inspector Rolando Sosa, para detener a estos violentos motochorros que efectuaron disparos asaltaron a un policía y le robaron su arma reglamentaria cuando se encontraba con su pareja.
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Fueron capturados en Villa Don Alberto en la mañana de este viernes y fueron identificados como los responsables de los 12 disparos hacia una vivienda.
