Preso intentó escapar tras comerse parte de la pared y casi muere asfixiado en una comisaría de Neuquén

Un hecho insólito y violento se registró en la Comisaría Quinta de Neuquén, donde dos jóvenes, recientemente detenidos por una serie de robos, iniciaron un motín. En medio del caos, uno de ellos se tragó un trozo de pared y estuvo a punto de morir ahogado.

Según informaron fuentes policiales, el joven de 24 años, que momentos antes se había autolesionado, fue esposado para contenerlo, pero junto a su cómplice comenzaron a destrozar una pared y a arrojar escombros contra los efectivos, alentando al resto de los internos a sumarse al desorden.

Durante el motín, uno de los detenidos ingirió accidentalmente un pedazo de escombro y comenzó a asfixiarse. “Se estaba poniendo azul y casi no respiraba”, describieron los policías, quienes lograron salvarle la vida aplicándole la maniobra de Heimlich.

Mientras se esperaba la llegada de refuerzos de la Comisaría 52, el mismo joven intentó escapar corriendo por los pasillos internos, aunque fue rápidamente reducido.

El origen del caso
Las detenciones se habían producido horas antes, luego de que los dos sospechosos en moto interceptaran y golpearan a un adolescente de 13 años para robarle un morral con un celular en el barrio Balcón del Valle.

Uno de los delincuentes fue reducido por vecinos y el otro, detenido tras ser visto arrastrando una moto en el cruce de las calles Chubut y La Rioja. Durante su arresto, reaccionó con violencia, arrojó un celular similar al sustraído e incluso intentó lanzarse de un patrullero en movimiento en plena Ruta 7.

Ambos fueron trasladados a la comisaría, donde finalmente protagonizaron el motín que terminó con destrozos, tensión y un preso al borde de la muerte por asfixia.