Horror en Río de Janeiro: 119 muertos y calles desiertas tras la operación antinarco más letal de Brasil

La operación policial más violenta en la historia reciente de Río de Janeiro dejó al menos 119 muertos y una ciudad paralizada por el miedo. Organismos internacionales y la Justicia brasileña reclamaron explicaciones al gobierno del estado por la falta de información sobre las víctimas.

Lula pidió una investigación urgente
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva expresó estar “horrorizado” por la magnitud del operativo, que fue conducido por el gobernador Cláudio Castro, aliado del expresidente Jair Bolsonaro.
“El presidente quedó horrorizado con el número de víctimas fatales”, confirmó el ministro de Justicia Ricardo Lewandowski, quien ordenó una investigación inmediata sobre la actuación de las fuerzas policiales.

Mientras tanto, organismos de derechos humanos denunciaron la falta de transparencia y exigieron información sobre los fallecidos. Castro, por su parte, defendió el despliegue como “un éxito” y sostuvo que “las únicas víctimas fueron los cuatro policías caídos”.

Una ciudad en silencio y con miedo
Río amaneció desierta, con escuelas cerradas y calles vacías tras los enfrentamientos en las favelas de Penha y Alemão.
“La gente está con miedo, no sale. Río parece otra ciudad”, relató Allan Silva, vecino de Barra de Tijuca.

El martes, en represalia por el operativo, el Comando Vermelho (CV) —una de las facciones narco más poderosas de Brasil— atacó avenidas y comercios, generando pánico entre los ciudadanos.
Con el correr del día, las zonas turísticas intentaron recuperar cierta normalidad: “Vivimos con temor, pero tratamos de seguir adelante”, contó María Contreras, una argentina que reside en Copacabana desde hace diez años.

Choques políticos y un nuevo plan de seguridad
Tras las tensiones entre el gobierno federal y el de Río por la falta de coordinación, Lula y Castro acordaron crear una Oficina para Combatir el Crimen Organizado, que buscará unificar las acciones entre las fuerzas federales y estatales.
El organismo será dirigido por Víctor César Santos (Río de Janeiro) y Mario Luiz Sarrubbo (Ministerio de Justicia), y formará parte del Plan Nacional de Seguridad Pública.

“El objetivo es actuar con rapidez y eficiencia contra el narcotráfico”, explicó Lewandowski.

El poder del Comando Vermelho
El Comando Vermelho, nacido en las cárceles de Río durante la dictadura en los años 70, se transformó en una red criminal transnacional, con presencia en Bolivia y vínculos con carteles colombianos.
Su presunto líder en el complejo de Penha, Edgard Alves de Andrade, alias Doca, es señalado por expandir el control del grupo en distintas comunidades.

El CV mantiene una rivalidad violenta con otras facciones, como el Terceiro Comando Puro (TCP) y el Primer Comando de la Capital (PCC), de San Pablo.

Según cifras oficiales, 700 personas murieron en intervenciones policiales en Río durante 2024, un promedio de casi dos por día, lo que refuerza las críticas por el uso excesivo de la fuerza.