El papel de Reinoso en el crimen de Cecilia y su declaración de inocencia

Griselda Lucía Reinoso, una de las imputadas por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, es hasta ahora la única que declaró ser ajena al crimen. Su abogada defensora manifestó esta postura en la tercera audiencia preliminar, desarrollada el martes 3 de junio, solicitando que se la desligue de la causa por no haber participado del hecho.

Tanto los representantes legales de la familia de Cecilia como los del Estado y el Equipo Fiscal Especial rechazaron la solicitud. La audiencia entró en cuarto intermedio y será el jueves, a partir de las 9 de la mañana, cuando se conozca la decisión de la magistrada.

El rechazo a la solicitud no sorprendió, ya que, según la reconstrucción del caso elaborada por la fiscalía, Reinoso habría colaborado con la familia Sena en la ocultación del crimen y la desaparición del cuerpo. Por ello, está acusada bajo el cargo de encubrimiento agravado.

¿QUÉ FUNCIÓN HABRÍA TENIDO REINOSO SEGÚN LA FISCALÍA?

El Equipo Fiscal Especial reconstruyó los hechos ocurridos el 2 de junio de 2023, día en que Cecilia fue vista con vida por última vez. En su cronograma, detallan el rol que habría desempeñado cada uno de los siete acusados, incluyendo a Reinoso.

La versión fiscal sostiene que ese día, Cecilia fue llevada engañada a la casa de la familia Sena en Santa María de Oro 1460, en Resistencia, con la promesa de un supuesto viaje a Ushuaia junto a su pareja, que incluiría trabajo y alojamiento.

Según esta línea investigativa, Cecilia fue asesinada entre las 12:13 y las 13:01. Previamente, Emerenciano Sena y Marcela Acuña habrían abandonado la vivienda poco después de las 08:00 para facilitar que su hijo cometiera el crimen. A las 09:14, César Sena llevó a Cecilia al domicilio y, aprovechando su situación vulnerable, la habría asesinado en la planta baja.

Después del homicidio, comenzó un plan para encubrir lo ocurrido. A las 16:58, Gustavo Obregón llegó al domicilio, seguido por su pareja, Fabiana González. Ambos habrían intervenido en la limpieza del lugar.

Más tarde, a las 19:27, Obregón regresó con su Citroën C4 y, junto a César, cargaron el cuerpo en una camioneta rumbo al "Campo Rossi". Allí, con la supuesta ayuda de Melgarejo y Reinoso, lo incineraron. Obregón habría comprado bolsas de consorcio para deshacerse de evidencias, y González, cercana a Acuña, habría organizado la limpieza de la casa y la eliminación de objetos ensangrentados.

Según el requerimiento fiscal, “Gustavo Melgarejo y Griselda Lucía Reinoso, encargados de custodiar el campo 'Rossi', permanecieron en el lugar durante la noche manteniendo el fuego activo para asegurar su completa combustión”.

"NO SERÍA CAPAZ DE HACER ALGO ASÍ": LA DECLARACIÓN DE INOCENCIA DE REINOSO

El 13 de junio de 2023, Reinoso declaró por primera vez en la causa. Se presentó como una mujer de 42 años, residente en Puerto Vilelas y madre de nueve hijos. Afirmó tener a tres bajo su tutela, mientras que cuatro fueron entregados en adopción por orden judicial en 2016/2017.

Durante esa declaración, visiblemente angustiada, sostuvo: “No sería capaz de hacer algo así, no lo hice”. Negó su participación y afirmó entre lágrimas que ese 2 de junio estaba en el campo Rossi. Dijo haber visto un vehículo sin poder identificarlo, con Obregón y César Sena a bordo, a quien mencionó como “el hijo del hombre”. “Yo no estaba a cargo del ingreso al campo, eso fue lo único que observé”, relató.

Agregó que ambos se dirigieron al fondo del terreno para buscar tierra, aunque no pudo precisar el horario, sólo que era de día y antes del almuerzo.

Contó que el 7 de junio se retiró del campo luego de una discusión con su esposo, Gustavo Melgarejo, también detenido. Su tarea en el campo consistía en alimentar animales, limpiar la casa y un galpón con maquinaria.

En su ampliación del 28 de junio, Reinoso se remitió a su testimonio previo y agregó: “Yo no hice nada de eso”, nuevamente entre lágrimas.

El 7 de agosto brindó otra declaración, esta vez más detallada sobre lo ocurrido antes y después del crimen.

Relató que comenzó a trabajar en el campo en abril de 2023 junto a Melgarejo, contratado por “Laucha”, el veterinario del lugar. Realizaban tareas básicas a cambio de un pago semanal de $5.000.

Aclaró que no formaba parte del movimiento de Emerenciano Sena ni recibía planes sociales vinculados a esa organización. Sólo cobraba el beneficio por ser madre de siete hijos desde hacía unos 11 años.

Dijo que el 2 de junio estuvo cenando en casa de un vecino, Don Ríos, y que el 3 de junio Obregón llevó carne de cerdo congelada. El 4 de junio llegaron al campo Emerenciano, Marcela y otros empleados, pero aseguró no haber tenido trato con ellos ni participar en sus actividades.

Sobre el 6 de junio, afirmó haber oído que César y Obregón pidieron una pala y una bolsa “para abono”. Escuchó desde el galpón, pero no supo qué hicieron después. Al día siguiente, dijo haber abandonado el campo tras otra discusión violenta con su esposo. “Me amenazó con apuñalarme. Me asusté, esperé a que se durmiera y me fui con mi hija. Llamé al 911 y nos fueron a buscar”.

Finalmente, relató que el 11 de junio la policía fue a detenerla a la casa de su padre en Puerto Vilelas. Aseguró que hasta ese momento desconocía todo lo ocurrido con Cecilia y que su vida en el campo era monótona, sin haber notado movimientos fuera de lo común.