Alerta en Rosario: buque procedente de Nigeria varado con un tripulante fallecido e investigan posible caso de ébola

Dado que la embarcación provenía de Nigeria y tenía como destino final la República del Congo, la situación generó una alerta sanitaria por posible riesgo de ébola. El fallecido es un ciudadano filipino de 47 años.

En el puerto de General Lagos, cercano a la ciudad de Rosario, se activó este lunes el protocolo sanitario tras el arribo de un buque desde Nigeria con un tripulante muerto. Por este motivo, se le realizará una autopsia para descartar que la causa haya sido ébola.

Se trata de un barco con bandera de Liberia, que zarpó desde la terminal portuaria de Onne, en Nigeria. Uno de los tripulantes, un filipino de 47 años, falleció en alta mar hace aproximadamente dos semanas. Debido a que el itinerario de la embarcación incluye escalas en África, el cuerpo fue trasladado al Instituto Médico Legal de Rosario para la correspondiente autopsia.

Dado que el barco partió de Nigeria y se dirigía a la República del Congo, la situación encendió las alarmas sanitarias por el posible riesgo de ébola. Por esta razón, la embarcación permanecerá detenida en la terminal portuaria de General Lagos hasta esclarecer la causa del fallecimiento.

Según fuentes judiciales, el buque “African Magnolia” llegó a General Lagos este lunes a las 19, con el propósito de cargar harina de trigo. Antes de su arribo, el capitán informó a la Agencia Marítima sobre el fallecimiento de un tripulante, ocurrido el pasado 25 de diciembre.

Con la intervención de la Unidad Fiscal de Rosario, representada por Javier Arzubi Calvo y la fiscal colaboradora María Virginia Sosa, se llevaron a cabo las primeras diligencias en coordinación con Prefectura Naval Argentina. Estas incluyeron la desinfección del buque —realizada por la Dirección de Fiscalización y Sanidad de Fronteras del Ministerio de Salud de la Nación—, la inspección de la embarcación y entrevistas a la tripulación. Además, el juez de Garantías Carlos Vera Barros participa en el caso.

El cuerpo del tripulante filipino fue conservado en la cámara frigorífica del barco. En principio, no presentaba signos visibles de violencia.