Sobreseyeron a Enrique Pescarmona en la causa Cuadernos por un deterioro cognitivo irreversible
El empresario Enrique Menotti Pescarmona, uno de los arrepentidos en la causa Cuadernos, fue sobreseído por el Tribunal Oral Federal N°7 (TOF 7) debido a un cuadro de deterioro cognitivo severo que le impide continuar como acusado en el juicio oral. La resolución se conoció en la antesala de la tercera audiencia del proceso, iniciado el 6 de noviembre.
La decisión fue firmada por los jueces Fernando Canero, Germán Castelli y Enrique Méndez Signori, quienes basaron su fallo en un informe del Cuerpo Médico Forense. Según el dictamen, el empresario de 84 años presenta un deterioro “moderado a grave”, compatible con una demencia tipo Alzheimer atípica en un estadio moderado a severo.
Un cuadro irreversible y la aplicación del artículo 336
El tribunal aplicó el artículo 336 inciso 5 del Código Procesal Penal, que permite disponer el sobreseimiento cuando el acusado sufre una incapacidad mental sobreviniente e irreversible que imposibilita su participación en el proceso penal.
En su resolución, los magistrados ordenaron: “Sobreseer a Enrique Menotti Pescarmona en orden al hecho por el que fuera requerida la elevación a juicio”.
Pescarmona no había participado de ninguna de las audiencias virtuales. Contaba con un permiso provisorio por motivos de salud, pero el TOF 7 ordenó finalmente una evaluación presencial. El informe médico determinó que el empresario estaba orientado solo “en persona”, desorientado en tiempo y espacio y con un juicio de realidad debilitado, lo que hacía inviable su defensa y su comprensión del proceso.
Se incorporará su testimonio como arrepentido
A pedido de la fiscal Fabiana León y de la Unidad de Información Financiera (UIF), el tribunal dispuso incorporar por lectura su declaración como arrepentido y las indagatorias previas, de modo que queden registradas en el juicio aun sin su presencia como imputado.
Cómo sigue el juicio Cuadernos
Con el sobreseimiento de Pescarmona, el proceso —considerado el juicio más grande de la historia judicial argentina— continúa con 86 acusados, entre ellos Cristina Fernández de Kirchner, señalada como presunta jefa de una asociación ilícita y coautora de cohecho.
Pescarmona estaba procesado por 13 hechos de presuntos pagos de sobornos entre 2008 y 2013, durante su conducción de la empresa IMPSA. Su exdirectivo Francisco Valenti permanece imputado como partícipe necesario.
Antes de que comenzara el juicio, el empresario ofreció una reparación económica de 510 millones de pesos, propuesta que fue rechazada por el tribunal y que actualmente analiza la Cámara de Casación.