El fisicoculturista que se casó con una muñeca inflable, ahora dice que se “enamoró” de un cenicero
“Me gusta el olor, la sensación del metal en mi piel. Es fantástico. Me gusta que toque mi piel, me excita, es lo que me atrae de este cenicero”, ha confesado en su cuenta de Instagram.
SOCIEDAD 05 de septiembre de 2021 redacción
Yuri Tolochko es un fisioculturista ruso que estuvo casado en 2020 con una muñeca hinchable a la que nombró Margo y de quien se divorció en mayo de este año. Desde entonces, está dando bastante que hablar por las redes. Especialmente, por el motivo de su separación: la adquisición de otras dos muñecas inflables.
Sin embargo, Luna y Lola, las dos muñecas con las que admitió ser “infiel” a Margo, no son los únicos objetos que han atrapado la atención del hombre: ahora dice haber tenido un flechazo con el cenicero de un bar.
Tras lo que describe en sus redes como una “decepción amorosa”, Tolochko ha confesado que mantiene una relación sentimental con este objeto de material metálico.
“Me gusta el olor, la sensación del metal en mi piel. Es fantástico. Me gusta que toque mi piel, me excita, es lo que me atrae de este cenicero”, ha confesado en su cuenta de Instagram.
Yuri Tolochko aseguró que quería volver a verlo y tocarlo de nuevo por la esencia que tiene debido a haber pasado por numerosas historias. Incluso ha llegado a varios acuerdos con los dueños del bar para que le presten el cenicero en algunas ocasiones durante la noche.
El icónico hincha de la Selección Argentina y hombre del bombo peronista falleció este miércoles a los 83 años.
La Administración Nacional de la Seguridad Social otorgará un extra en el mes de marzo.
SANTIAGO DEL ESTERO: llegó borracho a cargar nafta y se quedó dormido
Hoy el Eclipse solar total de abril 2024: a qué hora y cómo verlo en vivo, toda la información en la nota
El ICCTI invita a participar en la primera cumbre chaqueña de ciencia, tecnología e innovación
El evento se realizará el 10 de abril en el Centro de Convenciones Gala de Resistencia (Fray Bertaca 1750), en el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Ciencia y la Tecnología.